Josefina Montero, Ingeniera Comercial egresada de la Pontificia Universidad Católica de Chile es Jefe de la Unidad de Cambio Climático en Colbún, empresa dedicada a la generación de energía eléctrica y que actualmente está desarrollando una serie de nuevas y buenas prácticas para mejorar sus procesos de sostenibilidad.
#SheLeadsTheChange
- ¿De qué trata su organización?
Trabajo en Colbún, empresa que se dedica a la generación y comercialización de energía eléctrica en Chile y Perú y a entregar soluciones energéticas a la medida de cada cliente. La empresa cuenta actualmente con cerca de 1.000 trabajadores y una capacidad instalada cercana a los 4.000 MW a través de 27 centrales de generación. El plan es duplicar nuestra capacidad de aquí a 2030 en base a proyectos de fuentes renovables, tales como energía solar, eólica y el almacenamiento, con el objetivo de contribuir en la descarbonización de la matriz energética del país.
Actualmente Colbún cuenta con seis centrales registradas bajo estándares internacionales de reducción de emisiones que tienen la capacidad de reducir hasta 700.000 tonCO2e al año. En 2022 emitiremos un total de casi 1.500.000 bonos de carbono.
- ¿Cómo contribuye a mejorar el medio ambiente?
Como compañía estamos comprometidos con la transición energética del país y esto se ve reflejado en nuestra cartera de proyectos, ya que cada uno de ellos tiene el objetivo de contribuir con la descarbonización de la matriz energética. Este año hemos puesto en marcha 230 MW de energía solar y estamos construyendo más 800 MW eólicos a través del Proyecto Horizonte. A eso se suman los otros 1.000 MW aprobados ambientalmente en proyectos solares. Además, estamos preparando el ingreso de nuevas iniciativas a tramitación ambiental en los próximos meses.
Complementariamente, con la entrega de soluciones energéticas a medida podemos contribuir en la descarbonización de la huella de carbono de nuestros clientes. Ejemplos de lo anterior son: el diseño e implementación de medidas de eficiencia energética, la instalación de energía solar distribuida y la instalación de infraestructura de carga para autos eléctricos, entre otros.
Además de ofrecerle estas soluciones a nuestros clientes, también las estamos incorporando de manera interna con el objetivo de reducir nuestra huella de carbono. Tenemos la meta de reducir nuestro factor de emisión en un 30% a 2025 y en un 40% a 2030 y alcanzar el carbono neutralidad a 2050.
- ¿Qué otras mujeres le han inspirado en su carrera?
Hoy me veo muy inspirada por las mujeres que trabajan en la compañía. Nuestra industria es principalmente masculina. La dotación de mujeres en Colbún es del 22 % y se están tomando cartas en el asunto para aumentar nuestra participación, como por ejemplo talleres de liderazgo y mentorías. Lo anterior, con un foco especial en incorporar mujeres en áreas tradicionalmente masculinizadas. Estos espacios de encuentro nos han impulsado a crear lazos, compartir experiencias y contar con una buena red de apoyo interna para inspirarnos e ir rompiendo barreras.
Otra fuente de inspiración a lo largo de mi carrera fue que alrededor de 2017, me tocó viajar un par de veces a Colombia para juntarme con empresas y entidades de la industria energética de ese país. Algo que me llamo la atención en las reuniones, fue la cantidad de mujeres en posiciones de liderazgo que había, ya sea en la gerencia general y/o en la primera línea, situación que era totalmente opuesto a cuando uno se juntaba con empresas chilenas. Esa experiencia me sirvió para comprender de las mujeres sí podemos tomar roles de liderazgo en una industria normalmente “masculinizada” y me ha inspirado para tomar más y nuevos desafíos en mi carrera.
Creo firmemente en que las compañías y la sociedad, en general, se beneficia con el empoderamiento de la mujer.
- ¿A qué retos se ha enfrentado en su viaje profesional que podrían ayudar a otros?
Uno de los mayores retos, que desde mi punto de vista es transversal en las áreas de sostenibilidad y en mi caso particular en el área de cambio climático, es el de generar conciencia de que es un tema que nos tenemos que hacer cargo hoy para anticipar las implicancias en el futuro.
En muchas empresas lo que no se mide o cuantifica no sirve para tomar decisiones. Y, en general, el impacto del cambio climático es difícil de cuantificar. Por ende, tomar definiciones y acciones concretas respecto a este tema se puede postergar indefinidamente, porque no somos realmente conscientes de cuánto está afectando el negocio y del nivel de urgencia con el que es necesario actuar.
El reto consiste en establecer definiciones para que estos temas sean incorporados en la toma de decisiones y que sean criterios transversales a la compañía, que no estén radicados o sean responsabilidad solamente de las áreas afines con el medio ambiente o la sostenibilidad, si no que, en cualquier área de la organización, ya sea la de operaciones, construcción, finanzas u otra, las decisiones incorporen estos criterios desde el inicio de los proyectos o las iniciativas.
- ¿Cuál es tu visión para que las organizaciones y personas contribuyan a mejorar el medio ambiente?
Desde el punto de vista de las organizaciones, está cada vez más claro que ser sostenibles es un buen negocio en el largo plazo; además, los diversos grupos de interés así lo están exigiendo. Hoy día como organización los desafíos están en satisfacer las necesidades de clientes cada vez más informados y con mayor conciencia social, a atraer a las nuevas generaciones de inversionistas que tienen prioridades distintas y que van más allá de la rentabilidad puramente económica, en incorporar a nuevos talentos, en generar un impacto positivo en las comunidades y el medioambiente donde la compañía está inserta, entre otros focos.
Cabe destacar que además tenemos el desafío de actuar en forma colaborativa. Actuando en forma conjunta con la sociedad civil y el estado, las organizaciones podemos lograr mucho más que actuando en forma aislada.
Creo que las personas, desde lo individual, tenemos la capacidad para cambiar las cosas. Nuestro poder de compra es la mejor herramienta para guiar a las empresas a mejorar sus estándares. Tenemos el poder de premiar, con la compra, a aquellos que lo están haciendo bien. Hay que ser consumidores empoderados e informados para elegir productos sostenibles por sobre los que no lo son, así es como podemos empujar y forzar a las industrias a mejorar sus estándares.
Descubre más mujeres líderes aquí.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!